Juan Luis Guerra
"La Hormiguita"


La conoci­ una tarde
con su guitarra cazaba boleros.
Teni­a puesto un jean,
y una rosita amarilla en el pelo.

¿Que vas a hacer?
Me pregunto sonriendo.
"Lo que tu quieras", respondi­;
fuimos al mar y mojamos los suenos.

Guine mis ojos, y un delfi­n
pinto una ola rizada en su pecho.

Luego rei­, y rompimos el hielo;
nos mordimos los dedos
como viola en un solo de cello.

Eres como una hormiguita
que me besa y me pica,
que recorre mi espalda
y se acuesta en mi barba
a estudiar geografi­a.

Eres como un trapecista
que atraviesa mi lengua;
y tu circo de flores
me carga y me suelta
perdiendo la cuenta,
perdiendo la cuenta,
eres.

Y tuve ganas de llorar,
pero tan solo en mi ojo derecho.
Ella hablaba de la luna y de Chopin,
y yo tocaba el Preludio de un Beso.

Luego rei­, y rompimos el hielo;
nos mordimos los dedos
como viola en un solo de cello.

Eres como una hormiguita
que me besa y me pica,
que recorre mi espalda
y se acuesta en mi barba
a estudiar geografi­a.

Eres como un trapecista
que atraviesa mi lengua;
y tu circo de flores
me carga y me suelta
perdiendo la cuenta,
perdiendo la cuenta,
eres.